Para mí, escribir la sinopsis de mis novelas no es una tarea fácil.
No sé qué poner hasta que me siento y empiezo a escribir y, a partir del primer borrador, modificando, reescribiendo, recortando y añadiendo, toma forma la versión final (si es que esta llega alguna vez).
Porque no. No hay una fórmula mágica para escribir una sinopsis.
Si a ti te sucede lo mismo, en esta entrada te cuento algunos de los elementos a tener en cuenta a la hora de escribir una sinopsis.
Vamos allá.
Qué es una sinopsis
Espera, pero ¿qué es una sinopsis?
Es un texto breve que tiene el objetivo de ser un gancho para que el lector quiera leer la novela.
No es un simple resumen de la obra. Por eso, al escribirla debes encontrar el equilibrio entre revelar lo suficiente para despertar interés, no entrar en demasiados detalles y explicar de qué trata la novela sin hacer spoiler.
Sí, suena como si se requiriera ser un experto malabarista, aunque, al igual que en la cocina, es cuestión de encontrarle el punto.
Qué elementos tener en cuenta
1. Recuerda quién es tu público
Tú conoces (o deberías) al tipo de lector al que va dirigida tu novela.
Eso te da ideas sobre qué puede funcionar para él. Por ejemplo, no es lo mismo escribir la sinopsis de una novela negra que de una romántica. Tampoco es igual dirigirse a un público juvenil que a uno adulto.
Tenlo en cuenta y adapta el estilo y el lenguaje al lector potencial.
2. Utiliza un gancho
Es el ingrediente fundamental, con el que pones la miel en los labios del lector para dejarlo con ganas de más y que quiera sumergirse en la lectura del libro.
Seguro que te ha ocurrido más de una vez. Una novela te llama la atención, por el título, la portada o el autor, le das la vuelta y al leer el texto de la contraportada… pierdes el interés enseguida.
No pasas del primer o segundo párrafo y devuelves el libro a su sitio. O bien no era lo que buscabas, o la sinopsis carecía de gancho.

3. Conecta con el lector
Si el lector se siente identificado o empatiza con el protagonista o el conflicto, ganas puntos para que quiera leer tu novela.
Por otra parte, el refrán dice que la curiosidad mató al gato. Pero como no será un gato tu lector potencial, incluye en el texto semillas que despierten la curiosidad: ¿y qué pasará? ¿Cómo se enfrentará el protagonista a esa situación? ¿Qué secreto oculta el vecino de la casa de enfrente?
Así, la única forma de responder a las preguntas que han surgido en la mente del lector, será leer tu novela.
4. Emplea los personajes, la trama y el conflicto
Utiliza la sinopsis para mostrar a los personajes principales, su relación con la trama y presenta el conflicto. Así el lector sabrá qué le espera al abrir el libro y querrá descubrir cómo los personajes resuelven o se enfrentan al conflicto.
Sin embargo, no reveles el final ni hagas spoiler, salvo que tu objetivo sea que no compren tu novela.
Ejemplos de sinopsis
Y antes de terminar, te dejo dos ejemplos de sinopsis. Una de una novela romántica y la otra, de suspense. Ambas, en mi caso, cumplieron el objetivo de toda sinopsis, ya que me decidieron a leer la novela sin dudarlo.
En ellas, se ve la combinación de los elementos que te he comentado en el apartado anterior.
La hija del tutor, de Julie Klassen
Emma Smallwood vive con su padre viudo en un pequeño internado para chicos de Devonshire, al suroeste de Inglaterra. Después de la partida de su último alumno, Emma decide acompañar a su padre a la casa de un barón y de sus cuatro hijos, situada en la costa de Cornualles. Pero nada más instalarse y empezar a dar clase a los dos hijos más pequeños, comienzan a ocurrir sucesos misteriosos. ¿Quién toca el piano por la noche? ¿Y quién se cuela en la habitación de Emma, dejándole extraños recuerdos?
Los hijos mayores del barón, Phillip y Henry Weston, se enfrentan a sus propios problemas… y a sus propios secretos. Ambos recuerdan a la señorita Smallwood de los días que pasaron en el internado de su padre, cuando era una muchacha tímida y estudiosa. Pero ahora, uno de los dos se siente inesperadamente atraído hacia ella…
Cuando los sucesos extraños se multipliquen, ¿averiguará Emma en qué hermano debe confiar?
Llena de suspense, La hija del tutor lleva a los lectores a la tormentosa costa de Cornualles, un lugar famoso por sus naufragios y sus supersticiones, donde el peligro acecha, la fe se pone a prueba y el amor espera.
Si quieres leer mi reseña sobre esta novela, pincha aquí.

La cuna caerá, de Mary Higgins Clark
La heroína de esta obra es una mujer llamada Katie, abogada, inteligente, atractiva, que vive en una ciudad de Nueva Jersey, y que ha enviudado hace poco. Un accidente de coche, del que sale con algunas magulladuras, es causa que la trasladen al hospital, donde ve o cree ver a una figura conocida que lleva el cuerpo de una mujer hacia su automóvil en medio de la oscuridad de la noche…
Cuando, al día siguiente, descubren muerta a la mujer en su lecho, afirmando que se ha suicidado, Katie decide averiguar la verdad y pronto descubre los escándalos escondidos en las vidas de ciertas personas que parecen superficialmente ser ciudadanos respetables y serios. Con destreza y brillantez, Mary Higgins Clark entreteje la aterradora historia de una conspiración médica que deber permanecer oculta a toda costa, incluyendo eventualmente el asesinato. La novela llega a un clímax de tremenda intensidad cuando la propia Katie, de nuevo paciente en el mismo hospital para ser intervenida quirúrgicamente, es a la vez la cazadora y la pieza cazada.
Si te gustaría leer la reseña que hice para esta novela, pincha aquí.

¿Y tú tienes claro lo que escribir en las sinopsis de tus novelas o te quedas en blanco? Cuéntamelo en los comentarios.
Imagen de portada: Neosiam en Pexels.